El peronismo incorporó en la campaña electoral el reclamo argentino sobre la soberanÃa de las Islas Malvinas, con un proyecto de ley que obliga a Mauricio Macri a consultar al Congreso antes de firmar un tratado internacional que las involucre.
Fue presentado por en el Senado por los fueguinos José Ojeda y Julio Catalán Magni, miembros del bloque presidido por Miguel Pichetto. Lo anunciaron junto a la gobernadora de la provincia austral Rosana Bertone y sus coterráneos MatÃas RodrÃguez y MartÃn Pérez, de La Cámpora, signo de que no faltará número para aprobarlo en el Congreso.
El proyecto fue escrito por el ex embajador en Estado Unidos y Naciones Unidas, Jorge Argüello, y cita la cláusula primera de la Constitución que ratifica la "legÃtima e imprescriptible soberanÃa sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marÃtimos e insulares correspondientes, por ser parte integrante del territorio nacional".
Macri no la tuvo muy en cuenta durante su primera gestión presidencial. A pocos meses de asumir, en entonces vicecanciller Carlos Foradori firmó un convenio con su par británico Alan Duncan, que protegÃa derechos sobre la explotación itÃcola y petrolera en la región, una renuncia implÃcita al reclamo de soberanÃa.
Foradori minimizó la magnitud del escrito por considerarlo un comunicado y no un pacto bilateral, durante una exposición ante la Comisión de Relaciones Exteriores de Diputados que presidÃa Carrió, quien se plegó a la oposición en un repudio a la cancillerÃa.
No logró evitar que los incidentes se repitieran. Un año después, la declaración del G77 más China, que integra Argentina, incorporó elementos de aquel pacto Foradori-Duncan y la cancillerÃa aceptó sin chistar.
Y en diciembre último el embajador argentino en Londres, Carlos Sersale, reconoció en un tuit la soberanÃa británica sobre las islas y consiguió un pedido de interpelación de la oposición a su jefe, el canciller Jorge Faurie, avalado por Carrió en el recinto.
Unos dÃas antes, durante el primer dÃa del G20, Mauricio Macri habÃa recibido a la primera ministra británica Theresa May, la primera visita de la máxima autoridad de Inglaterra tras el conflicto bélico que Faurie evitó mencionar cuando describió el contenido de la reunión.
"Se abordaron todos los asuntos que comprende la relación bilateral, y que forman parte del diálogo entre Argentina y Reino Unido", eludió el ministro de Relaciones Exteriores, cuando fue abordado por la prensa.
Aun cuando habÃa logrado buen trato con la Casa Rosada, Bertone siempre repudió las relaciones carnales con el Reino Unido y hasta hubo manifestaciones de la Legislatura de Tierra del Fuego.
El debate parlamentario deberÃa iniciarse en la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, presidida por el radical Julio Cobos, y serÃa más que incómodo para el Gobierno, que ante cada polémica por su polÃtica sobre Malvinas apuró una aclaración.
La más recordada fue la que siguió al acuerdo Foradori-Duncan: Macri anunció en la cumbre de la ONU que habÃa iniciado conversaciones por la soberanÃa con Theresa May y rápidamente fue desmentido por el Foreign Office, el ministerio de Relaciones Exteriores británico. Susana Malcorra nunca supo explicar bien qué pasó.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
Esto es para los comentarios despiadados de un lado y del otro (p/pensar):
?Salimos a buscar a un monstruo y solo encontramos a un niño herido?.
Anulemos el convenio de pago con Marsans y con Repsol. No era que ellos nos iban a pagar a nosotros, según patiullita Kici el universitario charlatan.
Anulemos el pago al Club de París, pue sle pagamos casi el doble de lo debido, gracias al aporte de Kici, solidario con plata del pueblo